Hoy en día, los fisioterapeutas forman parte integrante de un equipo multidisciplinario en las unidades de cuidados intensivos (UCI) en multitud de países europeos, como Francia o Reino Unido, pero también en el caso de EE. UU. y Latinoamérica, como fue mi caso en Argentina. En estos países los fisioterapeutas son vistos como miembros integrales del equipo que maneja a los pacientes críticos.
La practicas más integradoras de medicina y gestión hospitalaria tienden a valorar la importancia del manejo fisioterapéutico en la UCI. Las complicaciones relacionadas con la UCI, como la perdida de condición física, la debilidad muscular, las infecciones respiratorias y las contracturas, pueden prevenirse o disminuir significativamente mediante una intervención fisioterapéutica temprana.
La fisioterapia en la UCI mejora el bienestar físico del paciente promoviendo el alta temprana y segura de la unidad de cuidados intensivos.
Según la WCPT, siglas en ingles de la Confederación Mundial de Fisioterapia, la fisioterapia en la UCI ayuda a reducir la morbilidad y mortalidad de los pacientes y a prevenir el aumento de la estancia la UCI y en general del total de la estancia hospitalaria. El enfoque del tratamiento fisioterapéutico en la UCI es la conjunción de la fisioterapia respiratoria y la rehabilitación física.
Cada día nuestros pulmones producen un líquido llamado esputo. El esputo atrapa las partículas de suciedad que respiramos y, de forma muy resumida, la expectoración y la tos ayudan a limpiar los pulmones. Los pacientes en la UCI pueden requerir asistencia respiratoria mecánica para respirar, pero la ventilación mecánica impide que los pacientes tosan y limpien la carga diaria de esputo, lo que causa su retención y con ello infección torácica u otras complicaciones.
La fisioterapia respiratoria en UCI ayuda a:
- reducir la retención de esputo, atelectasia y neumonía,
- mantener el volumen pulmonar,
- reducir la resistencia de las vías respiratorias y el trabajo de la respiración,
- optimizar la oxigenación y la ventilación,
- mejorar la fuerza del músculo respiratorio,
- mejorar la ventilación y el desfase de perfusión,
- minimizar las complicaciones postoperatorias,
- disminuir la dependencia del paciente del ventilador.
Además, la inmovilidad o inactividad prolongada es un factor que contribuye a la debilidad muscular en los pacientes en UCI. De acuerdo con “The Chartered Society of Physiotherapy (Reino Unido)”, en el caso de los pacientes que son ventilados mecánicamente por más de 7 días, el 25% muestran debilidad muscular significativa, y aproximadamente el 90% de los pacientes de UCI a largo plazo tendrán debilidad muscular continua. También pueden experimentar rigidez articular, tensión muscular y afección negativa de su forma física en general.
En general un programa de rehabilitación fisioterapéutica correctamente enfocado puede desempeñar un papel integral en el tratamiento y la prevención de estas complicaciones y contribuir a:
- mantener el rango de movimiento de las articulaciones y contribuir a que el paciente mantenga la fuerza muscular,
- ayudar a mejorar la condición cardiovascular-respiratoria,
- reducir la estasis venosa y el riesgo de trombosis venosa profunda,
- mantener y mejorar la tolerancia al ejercicio,
- contribuir a que el paciente mantenga la densidad ósea.
Como siempre decimos en Fisiorespi, la fisioterapia respiratoria al mejorar la condición física del paciente proporciona beneficios psicológicos y ayuda para volver a la función y a la vida cotidiana.